Tras la Corte Suprema ratificar la condena a la expresidenta Cristina Kirchner, diversas ficultades tomadas en la Universidad de Buenos Aires (UBA) fueron escenario de una protesta estudiantil significativa. En este artículo, se analiza la ola de tomas en Filosofía y Letras, Ciencias Sociales, FADU y Ciudad Universitaria, se describen sus reclamos y se contextualiza esta movilización en el marco de la defensa de la democracia y los derechos ciudadanos.
¿Qué son las “facultades tomadas”?
El concepto de **facultades tomadas** hace referencia a las instancias en que estudiantes ocupan físicamente espacios académicos para manifestar su desacuerdo. En este caso, las tomas fueron impulsadas tras la confirmación del fallo judicial que condenó a la exmandataria Cristina Kirchner.
Medidas similares se habían registrado anteriormente en 2024, cuando también se habían tomado facultades en rechazo a recortes presupuestarios. Sin embargo, en junio de 2025, las tomas adquirieron un enfoque político explícito, en defensa de la ex presidenta y en rechazo a lo que fue considerado un juicio con motivaciones políticas.
Facultades y cronología de las tomas
Filosofía y LetrasFue una de las primeras en plegarse a la protesta. Se emitió un comunicado repudiando la condena y convocando a movilizaciones, pidiendo un paro general a la CGT. En las paredes, pancartas declaraban: “Facultad tomada. No a la proscripción de Cristina”.
Ciencias Sociales
La medida comenzó el martes por la noche, con suspensión de clases durante más de un día. El reclamo incluyó la consigna “En defensa de la democracia, estudiantes con Cristina, facultad tomada”.FADU y Ciudad UniversitariaLas sedes de Arquitectura, Diseño y Urbanismo permanecieron tomadas desde la noche del martes, se restringió el acceso y se aplicaron esquemas de seguridad mínimos. También en Ciudad Universitaria se impidió el paso de medios de transporte.
Principales demandas y argumentos
1. Repudio al fallo judicial: los estudiantes calificaron la sentencia como “política” y denunciaron irregularidades en el proceso judicial.
2. Defensa de la democracia: argumentaron que estaba en juego el Estado de derecho y la plena vigencia de las libertades civiles.
3. Movilización social activa: se convocó a sumarse a medidas como la marcha al Garrahan, a la casa de Cristina y a Plaza de Mayo, exigiendo un paro general.
Rechazo al ajuste: se vinculó la condena con políticas de recortes en educación, salud, ciencia y cultura impulsadas por el gobierno de Milei.
Repercusión en docentes, gremios y medios
En Filosofía y Letras, la docencia universitaria fue suspendida en solidaridad, aunque se habilitó la opción de dar clase voluntaria .Se demandó que la CGT convoque al paro general y se anunció continuidad de la protesta en alerta permanente.
La acción fue replicada en otros centros educativos del país, incluyendo la UNLP, donde también se tomaron facultades.
Comparativa con tomas anterioresLas **ficultades tomadas** se inscriben en una tradición de protesta universitaria dentro de la UBA, como la histórica Noche de los Bastones Largos en 1966 y los conflictos por recortes presupuestarios en 2024.
No obstante, en esta ocasión la protesta se caracterizó por su base política precisa: no sólo cuestionó un fallo judicial, sino que involucró una estrategia de acción directa en defensa de una figura política proscripta, cuya condena se consideraba con motivación electoral.