El gobierno liderado por Javier Milei ha anunciado oficialmente el cierre permanente del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi).
Manuel Adorni, portavoz presidencial, afirmó en una conferencia de prensa en la Casa Rosada que el gobierno está comprometido con desmantelar instituciones que no contribuyan al beneficio de los argentinos. Adorni enfatizó que el Inadi es una de esas instituciones que, según él, no cumplen con un propósito significativo.
Reducción del Estado
El Inadi, establecido en 1995 durante la presidencia de Carlos Saúl Menem, tenía la responsabilidad de desarrollar políticas y acciones concretas contra la discriminación, la xenofobia y el racismo. A lo largo de los años, el instituto ha sido objeto de críticas y controversias debido a su presunta ineficacia y alegaciones de mal manejo de recursos.
Milei ha dejado en claro su compromiso con la reducción del Estado y la eliminación de gastos superfluos. Adorni subrayó que el cierre del Inadi es parte de esta estrategia para optimizar el uso de los recursos públicos y reducir la carga impositiva para los ciudadanos argentinos.
Reacciones y Críticas sobre el Cierre del INADI
La decisión de cerrar el Inadi ha generado reacciones mixtas. Mientras algunos, como el presidente de la bancada de diputados de Unión por la Patria, Germán Martínez, expresaron su absoluto repudio, otros, como Victoria Donda, ex presidenta del instituto, cuestionaron la prioridad del gobierno y lo acusaron de desviar la atención de problemas más urgentes.
Adorni también advirtió sobre las posibles consecuencias para aquellos que participen en movilizaciones contra la medida. Instó a los manifestantes a considerar las implicaciones legales y sociales de sus acciones, enfatizando que la policía responderá a cualquier infracción de la ley.