Diciembre llega con una serie de aumentos que impactarán en la economía de los argentinos. Estos incrementos abarcan servicios esenciales, combustibles, alquileres y otros rubros, reflejando la persistencia de la inflación. A continuación, se detallan los principales cambios previstos.
Suba de alquileres: un impacto sostenido en los inquilinos
El ajuste en los alquileres continuará siendo uno de los más significativos. Se proyecta un aumento superior al 20% para diciembre, impulsado por el Índice para Contratos de Locación (ICL), que ha acumulado un incremento interanual del 128,3%. Este aumento coloca a los inquilinos frente a un desafío económico considerable, ya que el Salario Mínimo Vital y Móvil solo cubre un 62,4% del costo promedio de un monoambiente.
Aumento de combustibles: el transporte más caro
El precio de los combustibles, clave para la economía diaria, también sufrirá ajustes en diciembre. Esta medida responde a la necesidad de actualización por costos internacionales y paridad cambiaria, lo que incrementará los precios finales al consumidor. Aunque todavía no se han definido los porcentajes exactos, se espera que los nuevos valores impacten en el costo de vida y el transporte.
Incrementos en alimentos y bebidas
El rubro de alimentos y bebidas seguirá mostrando aumentos significativos. Esto se debe a la devaluación acumulada y a los altos costos de producción, que se trasladan al consumidor final. En el sector mayorista, los precios de este rubro ya han superado el 230% interanual, lo que presiona al mercado minorista.
Tarifa eléctrica y otros servicios básicos
Diciembre traerá también ajustes en las tarifas de electricidad y gas, siguiendo los planes de segmentación tarifaria. Aunque estas subas están parcialmente reguladas, su impacto se hará sentir en los hogares, particularmente en aquellos que han perdido los subsidios.