En un movimiento estratégico para fortalecer la competitividad internacional de la industria nacional, el Gobierno argentino ha oficializado la eliminación de los derechos de exportación para el 88% de los productos industriales exportables. Esta medida, implementada a través del Decreto 305/25, busca dinamizar la actividad productiva y exportadora del país.
Detalles de la Medida
La eliminación de las retenciones afecta a 4.411 posiciones arancelarias, lo que representa un alivio fiscal significativo para aproximadamente 3.600 empresas, en su mayoría pequeñas y medianas, que constituyen cerca del 40% del total de firmas exportadoras del país. Estas empresas, durante 2024, generaron exportaciones por un valor de u\$s3.804 millones.
Los sectores beneficiados incluyen maquinaria agrícola, autopartes, productos farmacéuticos como hormonas y preparados de sangre, cosméticos, insecticidas, partes de motores, plásticos, metales y artículos de relojería, entre otros. La eliminación de las retenciones, que anteriormente oscilaban entre el 3% y el 4,5% sobre el valor exportado, busca mejorar la competitividad internacional de estos sectores.
Sectores Exceptuados
A pesar de la amplitud de la medida, ciertos sectores estratégicos han sido exceptuados y continuarán tributando derechos de exportación. Estos incluyen los insumos básicos difundidos, como hierro, acero, aluminio y petroquímica, así como la industria automotriz. La decisión de mantener las retenciones en estos sectores responde a consideraciones económicas y estratégicas específicas.
Impacto en las Economías Regionales
La eliminación de las retenciones también ha tenido un impacto significativo en las economías regionales. Productos como cáscaras de cítricos, jugos y esencias cítricas, sábalo, jugo de uva, vino, arroz sin cáscara parbolizado o procesado, arroz descarrillado, extracto de roble y de quebracho, papa, maní sin cáscara y aceite de maní se han beneficiado de esta medida. Sin embargo, algunos productos, como el arroz con cáscara parbolizado y el arroz con cáscara común, mantienen derechos de exportación del 3%, mientras que el tabaco sin procesar paga un 5%.
Objetivos y Perspectivas
El objetivo principal de esta política es mejorar la competitividad internacional de la industria nacional, especialmente en un contexto de reordenamiento de las cuentas públicas. Desde el Ministerio de Economía se ha destacado que la eliminación de impuestos distorsivos es una política sostenida, que ya había comenzado en enero con la quita de retenciones a las exportaciones agroindustriales de economías regionales y cadenas de valor como la textil algodonera, papel, cartón, alimentos y bebidas.
La medida busca dinamizar la actividad productiva y exportadora, particularmente de sectores con alto valor agregado y potencial de inserción global. Se espera que esta política incentive la inversión, la generación de empleo y el crecimiento económico en diversas regiones del país.