El cierre de empresas en Argentina se ha acelerado en los últimos años, especialmente durante la gestión de Javier Milei. Según informes recientes, más de 12.000 empresas empleadoras han desaparecido desde fines de 2023. Esta situación está íntimamente relacionada con la recesión económica y las dificultades que enfrenta el sector privado.
Recesión y su impacto en las empresas
La recesión ha afectado fuertemente a las empresas, especialmente a las grandes multinacionales. En total, 86 eventos de crisis se han registrado desde la asunción del gobierno actual, entre los que destacan despidos masivos, suspensiones y la salida de firmas del país. Entre las empresas que se han retirado del mercado argentino se encuentran gigantes como HSBC, Xerox y Clorox.
Causas del cierre de empresas
El clima económico desfavorable es uno de los principales factores detrás de estos cierres. La caída de la inversión y la falta de estímulos para el sector privado han debilitado la capacidad de las empresas para mantenerse a flote. Según expertos, la creación de empresas está directamente relacionada con el ciclo económico, y en un contexto de recesión, es difícil que nuevos emprendimientos surjan o que los existentes perduren.
Sectores más afectados
El sector más golpeado ha sido el textil y el calzado, con 22 eventos de crisis reportados. Otros sectores como el metalúrgico, comercio, y la electrónica también han sufrido notablemente. La industria en su conjunto ha sido uno de los sectores más perjudicados, acumulando la mayoría de los eventos de crisis.
Medidas del gobierno y su efectividad
A pesar de la implementación de algunas medidas, como reformas laborales o incentivos fiscales, estas no han sido suficientes para revertir la tendencia de cierres de empresas. Las políticas gubernamentales, muchas veces percibidas como insuficientes o tardías, no han logrado mitigar el impacto de la crisis económica.