El intendente de Tigre, Julio Zamora y el director general de la entidad, Fernando Uranga, formalizaron la firma de un convenio que permite brindar asistencia alimentaria e integral para más de 200 comedores y merenderos locales. “Estamos en un contexto económico muy complicado y es nuestra obligación estar atentos a las necesidades básicas de las y los vecinos”, expresó el jefe comunal.
“Estamos en un contexto económico muy complicado y es nuestra obligación estar atentos a las necesidades básicas de las y los vecinos. En Tigre tenemos muchas instituciones que trabajan de una manera muy activa, con una demanda que se fue incrementando a raíz de las dificultades que atraviesa el país. Esta es una gestión que permanentemente busca aplicar políticas y articular con diferentes entidades para mejorar el bienestar de la comunidad”, sostuvo el intendente Zamora.
Durante la reunión – de la que participaron además las concejalas Gisela Zamora y Cecilia Ferreira; y el secretario de Desarrollo Social y Políticas de Inclusión, Marcelo Marina – se dialogó sobre las dificultades socioeconómicas que atraviesan los sectores más vulnerables.
“El Banco de Alimentos recibe a más de 160 empresas que, de forma permanente, donan productos alimenticios y fondos. Esto es para acompañar a más de 1100 organizaciones, que alcanzan a más de 330.000 personas. Este acuerdo pretende dar visibilidad y accesibilidad para que todas las organizaciones que articulan con el Municipio de Tigre lo puedan hacer directamente con nosotros”, manifestó Fernando Uranga.
El Banco de Alimentos sostiene su labor con el objetivo de reducir el hambre, mejorar la nutrición y evitar el desperdicio de alimentos. El nuevo centro de distribución de Benavídez -que comenzó a estar operativo en mayo del 2023 – tiene 2800 m2 de capacidad para almacenar productos, seis bocas de expendio, cuatro bocas de recepción y dos cámaras de frío.
