La tormenta de Santa Rosa se convirtió en un verdadero clásico del calendario meteorológico argentino. Cada año, en torno al 30 de agosto, los pronósticos y la tradición popular se entrecruzan para anticipar lluvias y tormentas que marcan la despedida del invierno. En este 2025, los especialistas advierten que el evento podría venir acompañado de un proceso de ciclogénesis, lo que aumenta la expectativa y la atención de la población.
Según la tradición religiosa, la tormenta se relaciona con Santa Rosa de Lima, patrona de América, quien habría detenido con sus oraciones un ataque enemigo en el siglo XVII gracias a un temporal repentino. Desde entonces, cada fin de agosto se espera la llegada de este fenómeno.
La ciencia, sin embargo, aporta otra explicación: en esta época del año se produce el choque de masas de aire cálido y húmedo provenientes del norte con frentes fríos que aún dominan en el sur. Esta combinación crea el escenario perfecto para tormentas intensas, ráfagas de viento y abundantes precipitaciones.
¿Qué es la ciclogénesis y por qué preocupa este año?
Los meteorólogos explican que la ciclogénesis es el desarrollo o fortalecimiento de un sistema de baja presión en la atmósfera. Cuando esto ocurre, el mal tiempo puede intensificarse y extenderse en grandes áreas.
Para este 2025, los modelos climáticos señalan que hacia el sábado 30 de agosto podría consolidarse una ciclogénesis en el centro del país. De confirmarse, las lluvias y tormentas no solo llegarían con puntualidad a la fecha de Santa Rosa, sino que además podrían tener una intensidad mayor de la habitual.
Los reportes preliminares indican que las provincias de Buenos Aires, La Pampa, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos serían las más afectadas. Se prevén chaparrones, tormentas eléctricas y ráfagas de viento que podrían extenderse desde la tarde del sábado hasta el domingo, con posibilidad de lluvias residuales durante el lunes.
En el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), el Servicio Meteorológico Nacional anticipa que el mal tiempo podría comenzar en las últimas horas del viernes 29, reforzando la idea de un fin de semana marcado por la inestabilidad.
Los registros históricos demuestran que la tormenta de Santa Rosa no es un mito sin respaldo. En casi el 57% de los años, se han registrado tormentas o lluvias significativas dentro de los cinco días previos o posteriores al 30 de agosto.
Aunque no siempre presenta la magnitud de un temporal, la recurrencia estadística respalda la fama de este fenómeno como un verdadero marcador de la transición entre invierno y primavera.
¿Qué se espera para los próximos días?
- Ambiente templado y húmedo en la previa, con máximas superiores a lo habitual para fines de agosto.
- Desmejoramiento progresivo a partir del viernes en la noche.
- Ciclogénesis activa el sábado 30, generando lluvias y tormentas más organizadas.
- Persistencia de inestabilidad hasta el domingo e incluso parte del lunes.
Precauciones recomendadas
Ante este escenario, se aconseja:
- Mantenerse informado a través de los avisos oficiales del Servicio Meteorológico Nacional.
- Evitar circular en auto durante los momentos de mayor precipitación.
- Asegurar objetos en balcones, techos y patios que puedan volarse con el viento.
- Prever cortes de energía eléctrica en zonas vulnerables.